viernes, 20 de octubre de 2017

Imbécil como yo

¿Quien iba a querer estar con un imbécil como yo?
Una persona tranquila que a veces sólo lee un libro
Poca dinamia de su vida y de su cuerpo
Estrella errante que no brilla.
Sombra roja de luna zurda que se arrastra en babas 
Mejor subirse en la espalda del ser amado
Cómo caballo montando para salir del lugar
Y que uno mire desde abajo
Con el labio mordido de tanto querer olvidar
Y pensar que es mejor pasar esta etapa del duelo
Ya no recaer aunque sepamos que no nos podremos volver 
a levantar.
Que no nos vamos a volver a ver. Nunca.
Yo no quiero que me vean, por eso vengo a este lugar
La guarida casi secreta desde donde 
Les recitare un poema o un mal augurio. 

Tienes miedo a las visitas, pero más a lo que estás implican 
“las marcas que dejan”
Entre más largo se hace el tiempo más lo queremos usar.
Ya no sabemos ni en que o como malgastar. 
Ahora yo, quiero enfrentarlo todo. Aceptar que suceda. 
No puedo esperar más, ya no quiero que pase
Lo que no tenga que pasar. 
Sigo creyendo en milagros y que el dolor sólo es mental.

1 comentario:

Sanmita dijo...

¿Quién va a querer estar con un chico como tu?...
Fácil de responder, muchas!!!
A mi me hubiese encantado, solo que cometí una falta grave, y no puedo repararla, por eso solo deseo tenerte una vez más para así poder seguir con mi destino.
Sé bien que la mejor forma de amar es entregar todo de mi, dar la mejor versión de mi misma, sin embargo no lo hice.
No me arrepiento de haberte conocido, jamas lo haré, siempre recordare esos ojos de regalo y esa sonrisa picara.
Perdóname si nunca pude sostener una mirada contigo, me daba pena, mucha pena, soy nerviosa y torpe, algo testaruda, bastante enojona, muy controladora, por eso, cuando me siento desnuda ante alguien tiendo a esconder mi rostro, ya que no puedo mentir con la mirada.
No quise desilusionarte, jamas fue mi intención, solo que perdí la fe de encontrar a alguien que en verdad le interesara, no creí que siguieran existiendo personas como tú, las cualidades perfectas, aunque eres muy berrinches y dramas, sigues siendo el niño ideal.
Te ganaste un hermoso sitio en mi corazón de piedra, te recordare con una gran ternura.
Lo que te dije “te quiero”, si es cierto, solo quería que lo supieras, no lo tomes a mal, no me detestes.
Y si después de esto te indignas (como siempre), pues me vale ya quede en paz con mi almita ya dije lo que tenia que decir y puedo morir en paz.
Por cierto, besas delicioso… me regalarías un beso más?